Teorias de insomnio.
Me pregunto si será el café, si me he bebido todos esos problemas y ahora no
puedo dormir (pensar en resolver la vida el día de mañana, pensar en ese peso
sobre mis hombros) o sólo he despertado muy tarde y mi cuerpo no me exige
dormir.
Tras esta nube negra bajo mis pestañas con la generación constante de sonidos
invisibles, un perro que ladra a la distancia, la ambulancia que pasa, un
ventilador en la bodega de al lado o la televisión de la vecina, aquellas
maquinaciones son o me he quedado dormido y mi mente se ha quedado funcionando
en todo esto como imágenes del subconsciente, ¿qué será entre todo ello?
Pero basta de especulaciones, mejor a la idea, y la idea es que ... justo se
concilia el sueño antes de concretar la idea, justo se muere antes de finalizar
la vida, justo se sabe del amor antes de perderlo, justo se vive en la línea de
fuego antes de perecer quemado, y esa sensación de corazón a punto de saltar
del pecho no es más que lo sobrante de una sensación pasada, es decir, el
corazón está excitado por el pasado inmediato, no el presente, pues el presente
es el corazón y su sonido ensordecedor, en lo interno, en las venas engordando,
no ya lo vivido, no ya la razón de su excitación, pues uno vive en la línea de
fuego sin siquiera notarlo, no, hasta que el corazón da saltos, es entonces que
se pierde el sueño, que uno se sabe humano.
Que uno se sabe.
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