En el principio fue... (lengua)

Y qué pasa si no hubo principio (y si no hay final). Entonces creer —como la fe— que hay un principio para quien llegó y lo vio todo construido, y antes de él vio las cosas ya construidas, y detrás de él había alguien también que miró el mundo ya construido, y el primer hombre (que no sería entonces un hombre pensante del todo), que aún no podría ser un hombre que escribiera y un hombre que hablara (pues para hablar tendría que haber más de uno y para escribir tendría que haber un lenguaje) —digo hombre pero hay más probabilidades de que fuera una mujer—, y aquel entonces o no existió o fueron muchos hombres.

Y si los humanos llegaron todos en conjunto y luego descubrieron la palabra y después descubrieron la escritura y luego, ya casi al final, debieron empezar por escribir aquello importante, aquello que nadie podría hablar y eso fue hablar sobre el inicio.

Entonces ya era demasiado tarde, el principio —si es que hubo un principio— había quedado muy atrás, allá donde los humanos que llegaron en multitud todavía no aprendían a hablar y todavía no aprendían a escribir y entonces había que crearse un principio. Porque la creación no es la creación del hombre, la creación es la creación de la palabra.

Primero el verbo, luego la escritura, luego el inicio.

Algo no cuadra aquí, el orden en que son las cosas, será entonces que el inicio, de todo hombre es el inicio de toda escritura, no hablo de la historia, hablo del ser, no hablo del universo, ni de todos aquellos dioses, tan solo hablo del humano, y por lo tanto del inicio de todos los tiempos.

Al principio no fue dios, al principio no fue el hombre, al principio no fueron los cielos y la tierra, ni Gea, ni…

En el inicio “la palabra”, luego el principio.