De nostalgia.

Cuando la nostalgia se agolpa en el pecho, tan fuerte y tan cerca del corazón, que parece imposible sacarse ese aire añejo, no se puede correr al pasado, no se puede saltar en el tiempo, caminar hacia atrás, o cerrar los ojos y recordar, cada sabor y cada olor, allí el recuerdo de un momento especial.

Y allí lo sientes llegar, como un estornudo, es el recuerdo de un lugar, un gesto y una conversación, en otro plano casi paralelo, viene la idea que en aquel momento tenías del mundo y hacia donde ibas, el hubiera aparece en escena y te das cuenta que viajar hacia atrás es también viajar hacia delante, y que la mente no puede detener ese flujo constante de ideas que brotan de cada imagen.

Hay risas en ese soplo de nostalgia, hay gritos, tragos de tiempo, hay cosas que nunca regresa y por ello se entierra, allí entre los pulmones y el corazón, donde están destinadas a rendir hasta el final un homenaje.