Es un palpitar ajustado, revuelto, un palpitar de sangre cubierto, tambor del tiempo, tambor del movimiento. El tic-toc en a la puerta con todos sus nervios, estribos en manos temblorosas, puertas de pasillos largos y la sangre en las manos, los pies, respirar el miedo, el rincón lleno de rencores, el espejo de las vidas, el reflejo de las muertes. Es un palpitar inútil, un péndulo que no se frena hasta que llega el último, que como el primero, resulta en una puerta hacia la nada y, al mismo tiempo, la puerta al infinito.


Comentarios

Unknown ha dicho que…
Hablas de un nacimiento? Victor perdí tu número me agregas? 9841846100 me hace falta la dosis Zwych

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