Largas Borracheras

Y la luna ecléctica apenas dibujada tras las nubes dispersas, encuentra su sentido al darse de frente contigo, en el mismo momento en que te encontró antes de saber que querías ser, aquel que dibujó las esferas de vapor, las noches de insomnio, los poemas mal escritos, las cartas a las princesas, los desbarajustes de aquella cena que tomaba en el balcón, mientras imaginaba a la luna en movimientos confusos, y a los rostros sin forma reconocible, en aquella noche, tu me encontraste a mí.

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